22 de febrero de 2017

Uso de reacción en cadena de la polimerasa en tiempo real (PCR–Q) en el desarrollo de un biofertilizante para el maíz


Guadalajara, Jalisco. 14 de febrero de 2017 (Agencia Informativa Conacyt).- La investigación para crear un biofertilizante para maíz blanco que disminuyera el impacto económico, ecológico y de salud y que resultara en una alternativa a la fertilización química fue el proyecto que hizo a Jesús Francisco Echaide Aquino acreedor al Premio Estatal de Ciencia y Tecnología 2016, en la categoría de Investigación Temprana.

Uso de reacción en cadena de la polimerasa en tiempo real (PCR–Q) en el desarrollo de un biofertilizante para el maíz: evaluación de la germinación y asimilación de nitrógeno inducidos por bacterias rizosféricas inéditas es el nombre del proyecto que desarrolló por casi dos años el recién egresado de la licenciatura en biología de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG).


“La idea era crear un biofertilizante a base de bacterias con la capacidad de aumentar la asimilación de principales nutrientes hacia la planta, en este caso el maíz blanco”, explicó el joven, quien ingresó al Laboratorio de Biotecnología, liderado por el doctor Miguel Beltrán García, como parte de sus prácticas profesionales desde finales de 2014. Este biofertilizante se propone como una alternativa a los fertilizantes comerciales, mismos que propician una contaminación química excesiva en la tierra de cultivo, limitando su utilización como tierra fértil. Además, el equipo consideró que en un periodo aproximado de 30 años los fertilizantes químicos subirán de precio y se tendrá un acceso más limitado al agua. El biofertilizante está formado por un consorcio de ocho bacterias endófitas, las cuales regulan la asimilación del nitrógeno en la planta. Este elemento resulta esencial para el crecimiento de cualquier célula.Ver mas

11 de febrero de 2017

Norma BRC (British Retail Consortium)


La norma BRC (British Retail Consortium) es un sistema de seguridad alimentaria desarrollado por la distribución minorista británica. Básicamente surgió como necesidad de desarrollar una norma uniforme de calidad y seguridad alimentaria, entre los factores más determinantes para ello destacamos las demandas de los consumidores, la responsabilidad cada vez mayor de los distribuidores, el incremento de requisitos legales y la globalización del suministro de productos. 

7 de febrero de 2017

Uso de procesado de alta presión en la industria cárnica latinoamericana

El ganado representa una fuente de ingresos importante para América Latina; más de un billón de personas alrededor del globo terráqueo dependen de este sector y el 70 % de los 880 millones de personas con bajo ingreso -menos del dólar por día- dependen al menos parcialmente para su sustento.
En la actualidad, la industria de la carne de res en Brasil representa el tercer mercado de mayor consumo de carne en el mundo. Argentina, Uruguay y otras naciones suramericanas ejercen también una poderosa influencia en el escenario mundial del mercado cárnico.
La industria de la carne ha ido enfrentando nuevos retos debido a un mayor número de consumidores más y mejor informados en cuanto a los alimentos que consumen y a una mayor demanda de productos mínimamente procesados, seguros y con altas propiedades nutricionales y sensoriales. Es así, como a principios de los noventas se comenzó a desarrollar la tecnología HPP, representando una innovadora alternativa para tratar la carne. (Lea: Un producto procesado no es sinónimo de químicos)
Principios de HPP
HPP (High Pressure Processing), también conocida como alta presión isostática, es relacionada frecuentemente con High Hydrostatic Pressure (HHP) y Ultra High Pressure (UHP). Se trata de un tratamiento que mata microorganismos mediante la interrupción de las funciones a nivel celular de la carne utilizando altas presiones y sin empleo de calor.