1. Instala una
cafetera
El consumo del café crece en México (1.7 kilogramos al
año) y se ha convertido en la bebida “oficial” de los espacios de trabajo,
especialmente por sus propiedades energizantes y su delicioso sabor. Instala
una máquina de café (de preferencia que despache gratuitamente) en una parte de
tu oficina donde varios miembros se puedan reunir al mismo tiempo. Añade otras
opciones como té y jugos, para quienes lo prefieran, así como un filtro con
agua fría y caliente.
2. Ofrece un servicio
de comedor
La comida es un tema importante en las oficinas. Por
lo común los empleados tienen dos opciones: o comer fuera de la oficina en
restaurantes y puestos de la calle, lo que significa un gasto considerable y es
poco sano, o si tienen más tiempo, ir a su casa, lo que es una pérdida de
tiempo y dinero en traslados. Una buena opción es ofrecer un servicio de
comedor gratuito o de bajo costo como prestación. Es importante asegurar la
calidad, el balance y el aporte nutricional de los alimentos.
Otra idea que aplican empresas como Ooyala,
una firma de gestión de videos con sede en Silicon Valley, es dedicar un día a
una comida especial. En las oficinas estadounidenses, los jueves son de sushi,
mientras que en las de Guadalajara el menú varía de hamburguesas, birria,
sushi, pozole u otros, según una encuesta realizada semanalmente a los
empleados.
3. Decora el espacio
físico
La decoración del espacio de trabajo influye en la
productividad y motivación de los empleados. Añade color a tu oficina; los
tonos cálidos, como el rojo y el naranja, dan energía pero pueden ser un poco
estresantes, y los tonos fríos, como el verde y el azul relajan. Lo mejor es
tener una combinación entre ambos, y adornar las paredes con imágenes creativas
e inspiradoras.
Una opción es colgar posters donde se exprese la misión y visión de la
empresa de forma divertida. También es recomendable establecer paredes o
pizarrones donde los miembros del equipo puedan compartir pensamientos y
comentarios, o simplemente relajarse haciendo dibujos.
En cuanto a la disposición del espacio, apuesta por
mesas largas de trabajo, sin separaciones, ya que éstas impulsan el trabajo
colaborativo y la generación de ideas. Procura que haya un espacio abierto
donde los miembros de tu equipo puedan reunirse y tomar un poco de aire fresco,
e incluir sofás en las salas de juntas para cambiar la postura y procurar
comodidad.
Tip extra: Apuesta por materiales y mobiliario
reciclado y por opciones de iluminación naturales, para reducir el gasto
energético.
4. Realiza actividades
fuera de la oficina
Las actividades recreativas y ajenas al contexto
laboral pueden ser ideales para motivar el trabajo en equipo y las relaciones
entre sus miembros. Al menos una vez al mes planea una reunión (de preferencia
al aire libre) donde convivas con tus colaboradores y se despejen del estrés
del trabajo diario. Podrías organizar un partido de futbol, un día de campo o
la visita a un recinto cultural o evento artístico.
Recuerda que la integración es fundamental para
aumentar la lealtad por la empresa y mejorar el clima laboral.
5. Impulsa una
actividad social o pro-ambiental
Además de ser una responsabilidad que tienes como
empresa y de mejorar tu imagen al interior y al exterior, sumarte a una causa
social y/o ambiental puede ser una estrategia efectiva para que tus empleados
trabajen como equipo en pos de un objetivo y conozcan una parte más humana de
ti y de sus colegas.
De acuerdo con el perfil de tus empleados, elige una o
varias instituciones a las que apoyar. Una buena forma de hacerlo más efectivo
y divertido es realizando competencias sanas entre tus colaboradores. Por
ejemplo, para la temporada navideña podrían hacer una colecta de ropa por
equipos, y aquel que reúna más prendas obtiene un premio como un día libre o
una comida gratis, o algo más simbólico como un ‘trofeo’.
6. Actualiza los
programas y equipos continuamente
No hay nada más desesperante que trabajar con
herramientas insuficientes y máquinas obsoletas que no permiten a las
personas hacer su trabajo eficientemente. Cada cierto tiempo actualiza el
software de tus computadoras y los principales programas. No necesitas gastar
una fortuna en adquirir nuevo equipo, puedes arrendarlo por menor
precio y esperar a que tengas suficiente liquidez para comprar uno nuevo.
7. No prohíbas que la
gente revise sus redes sociales
Si bien las redes sociales podrían significar una
pérdida de tiempo, debes tener en cuenta que éstas son parte de la vida de
muchas personas y que, de hecho, les son necesarias para comunicarse y
mantenerse actualizados.
En especial, si trabajas con millennials, esta
prohibición te dará una imagen de empresa anticuada y poco innovadora. Así que
si quieres atraer talento joven no sólo no lo prohíbas, sino que motiva su uso
e impulsa a tu equipo a escribir y publicar temas positivos sobre su trabajo.
8. Ofrece horarios
flexibles
El horario fijo de 9 a 6 está probando ser cada día
menos eficiente en las empresas. En primer lugar, porque en ciudades grandes
esta clase de horarios genera tráfico excesivo y contaminación; en segundo,
porque no todas las personas funcionan a la misma hora; y tercero, porque
ofreciendo flexibilidad los empleados tendrán mayor balance con su vida
personal, lo cual te agradecerán.
Puedes brindar distintas opciones de horarios y dejar
que tus empleados elijan, y permitir que al menos una vez a la semana trabajen
desde casa u otro lugar. La ideología detrás de esto es que la gente trabaje
más por metas a cumplir que por el reloj.
9. Crea proyectos que
no estén relacionados con el trabajo
Otra forma de relajar y hacer más divertido el clima
laboral es realizar proyectos ajenos al trabajo diario de los miembros. Podría
ser algo en beneficio de la empresa, como decorar de manera original la
oficina, desarrollar algún prototipo de un producto aunque no se vaya a lanzar
o trabajar en conjunto diseñando una campaña de marketing.
Salir de la rutina les permitirá aumentar su
creatividad, abandonar su zona de confort e
interactuar con personas con las que normalmente no lo hacen.
10. Motiva la salud de
tu equipo
Pocas cosas harán sentir a tus empleados valorados
como mostrar una preocupación genuina por su salud y bienestar. Impulsa en tu
oficina el ejercicio y la
alimentación sana, entregando, por ejemplo, opciones de frutas y yogurt para
desayunar. También puedes instalar una caminadora o acondicionar un pequeño
espacio (incluso en el mismo escritorio) donde cada mañana o a medio día hagan
ejercicios de yoga y respiración.
Otra idea es crear una oficina bici-amigable, donde
puedan estacionar sus bicicletas, e inscribir a tu equipo a carreras o eventos
deportivos. Además, cada seis meses o un año realiza check-ups para evaluar el estado de salud de cada miembro.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Gracias por comentar...